Dinamismo de prótesis de pecho
De forma recurrente oigo hablar sobre la mama dinámica. ¿Qué es esto? En un aumento de pecho, cuando los implantes se colocan en posición submuscular, el músculo pectoral mayor desplaza los implantes al contraerse, haciendo que las prótesis se desplacen hacia fuera y suban, lo que distorsiona la forma de la mama. Las mamas dinámicas están en relación con la discusión de cuál es la mejor posición para el implante en un aumento de pecho: si por encima o por debajo del músculo. Muchas pacientes nos preguntan ¿cuál es mejor? ¿qué queda más natural? Pues no es tan simple de responder.
Precisamente desde que introdujimos la técnica subfascial en el aumento de mamas en España, en el año 2003, hemos realizado más de 300 aumentos subfasciales. Precisamente, la principal razón para comenzar a trabajar con esta técnica era evitar la mama dinámica. A día de hoy, ya llevo operadas tantos casos de aumento de pecho subfascial como submuscular. La decisión de una u otra estará en función de las características físicas de la paciente (fundamentalmente el grosor del tejido de la mama, si tiene glándula o no, si hay suficiente panículo adiposo o no), del tipo de resultado que desea en cuanto a volumen y estética del polo superior y de si hace ejercicio físico o no (y si lo hace, qué tipo). ¿Siempre subfascial? No. ¿Siempre submuscular? No.
La posición submuscular (subpectoral) nació en los años 70 al observar que la incidencia de contractura capsular era menor que con la pre-pectoral subglandular. Pero claro, hay que tener en cuenta que en aquella época los implantes no eran como los de ahora: sus envolturas eran menos resistentes y los geles más liquidos que podrían trasudar la pared del implante. La transmisión generacional de esta enseñanza ha perdurado hasta nuestros días, a pesar de que los implantes han evolucionado. En mi opinión, la posición más natural del implante es la pre-pectoral. En esta posición el implante esta justo detrás de la glándula y se comporta realmente como parte de la mama. Dentro de la posición pre-pectoral, la posición subfascial nos permite separar el implante de la glándula mediante una estructura anatómica, delgada pero muy resistente que es la fascia del músculo. Puede usarse en mujeres que tengan hasta un grosor mínimo del tejido subcutaneo de 1.5 cm. Por debajo de ese mínimo grosor puede ser que el implante sea visible o que se noten las arrugas que forma la pared cuando está dentro del bolsillo (el llamado «rippling»).
¿Todo esto que quiere decir? Que la posición submuscular será necesaria en aquellas pacientes delgadas en las que hay riesgo de que se vea el implante, independientemente de si hacen ejercicio. También soy partidario en pacientes que deseen prótesis redondas, porque el músculo presiona el implante y hace más natural el resultado. Pero el riesgo de un aumento de pecho submuscular es que se produzca una mama dinámica, es decir, la distorsión de la mama por el movimiento del implante. El músculo se engancha en la cápsula del implante y se apoya sobre ella al contraerse, desplazando el implante. Por ello recomiendo no potenciar el músculo pectoral tras la cirugía en mujeres que llevan los implantes bajo el músculo. No es que limitemos el ejercicio físico, se trata de evitar el entrenamiento específico de ese pectoral. En cambio, en pacientes con grosor suficiente, hagan o no deporte, la posición pre-pectoral subfascial en el aumento de pecho es la más adecuada. Las prótesis anatómicas nos dan en esta posición un contorno muy natural y la prótesis se moverá con el conjunto de la glándula, pero no por la contracción del músculo.
Dr. Jesús Benito Ruiz es el director médico y cofundador de Antiaging Group Barcelona, con más de 30 años de experiencia en Cirugía Plástica, Estética y Reparadora. Licenciado con honores en Medicina y Cirugía por la Universidad de Valencia, se especializó en Cirugía Plástica en el Hospital “La Fe”. Ha sido presidente de la AECEP y vicepresidente de la SECPRE.
Reconocido por su innovación en técnicas quirúrgicas, el Dr. Benito Ruiz ha desarrollado procedimientos avanzados como el aumento mamario con grasa propia y el lifting facial sin cicatrices visibles. Es autor de numerosas publicaciones científicas y participa activamente en congresos internacionales. Entre sus premios destacan el Premio Gómez Ferrer Navarro de Cirugía y el Premio McGhan por sus avances en cirugía mamaria.