Es el tema del que todo el mundo habla y no es para menos, ya que según la ONU en los últimos 20 años la contaminación ha aumentado un 80% (sí, has leído bien, un 80%). Sus consecuencias son demoledoras para la salud, pero también para el cutis. Por eso hoy queremos contaros cómo afecta la polución a nuestra piel y qué podemos hacer para evitarlo (en la medida de lo posible)
Hasta hace no tanto, nuestra mayor preocupación al salir a la calle era protegernos de la radiación solar. Hoy, sobre todo si vives en grandes ciudades, también has de salvaguardar (todo lo que puedas) tu piel de la polución. Según un estudio de la firma Elizabeth Arden, las mujeres que viven en áreas urbanas donde hay altos índices de contaminación, tienen un 20% más de manchas y arrugas que las que viven en zonas rurales. Así que, si eres de las urbanitas, te recomendamos tomar nota.
Cómo afecta la polución a la piel
La polución ambiental es un factor importante para el empeoramiento de la piel. Las partículas microscópicas en suspensión del ambiente contaminado penetran a través de los poros y crean en la dermis cambios moleculares que alteran su estado. La deshidrata, provoca acné, aumenta la aparición de arrugas, acelera el envejecimiento y le resta brillo y color: la tez se vuelve grisácea, como si un velo de humo la cubriera.
¿Cómo combatir los efectos negativos de la polución?
- Mantén la piel hidratada, es sinónimos de tener las defensas altas frente a la polución. En las ciudades con alto índice de contaminación las pieles sufren mucho. Especialmente las pieles secas y deshidratadas porque su barrera protectora está alterada y por tanto, su sensibilidad es mayor. Es fundamental utilizar cremas o serums hidroprotectores y apostar por tratamientos que ayuden a mantener el equilibrio de la piel.
- Cuidado con la combinación sol y polución: es altamente peligrosa. Ambos son dos grandes fuentes generadoras de radicales libres que, juntos, se convierten en un coctel nefasto que acelera el envejecimiento de la piel. No salgas a la calle sin cremas con alta protección solar, mínimo SPF 30 aunque lo recomendable en las zonas urbanas es SPF 50.
- Ponle barrera al ozono “malo”. Es el gas que se genera por la reacción entre la luz ultravioleta y los humos de los coches. Sus efectos son muy dañinos para el cutis, no solo en las capas superficiales, también alcanza a las más profundas llegando a degradar el colágeno. Apuesta por productos beauty con alto poder antioxidante y compleméntalos con tratamientos médicos, prevendrás y frenarás sus efectos.
- Hazte una limpieza a fondo todos los días. En ambientes cargados de contaminación, es vital limpiarnos (bien) la piel de día y de noche para liberarnos de las partículas que se van adhiriendo y aceleran el envejecimiento.
- Mascarillas ¡al rescate! Con ellas purificarás tu piel de urbanita y le devolverás el brillo natural a tu tez. Los expertos recomiendan aplicarnos una mascarilla, al menos, una vez a la semana.
¿Crees que la polución ya está afectando a tu piel? Contacta con nosotros, nuestro equipo experto te hará un diagnóstico personalizado del estado de tu dermis y te recomendará los tratamientos necesarios para su recuperación.
Se inició en el campo de la Medicina y la Cirugía Estética en 1999, creando el grupo de Medicina Estética de Antiaging Group Barcelona en 2004, y responsable del área de Láser desde 2006.
Actualmente profesora del Máster de Medicina Estética y del Bienestar del IFMiL (Institut de formación Mèdica i Lideratge), con la colaboración de la Universitat de Barcelona y del COMB (Colegio Oficial de Médicos de Barcelona).
Participa en diferentes líneas de investigación y publicaciones científicas.