El yoga facial rejuvenece, relaja y libera estrés acumulado en el rostro. También oxigena la piel, activa y tonifica los músculos de la cara, mejorando la circulación sanguínea.
Se trata de una técnica que tonifica los músculos del rostro dirigida a todo el mundo. Solo se necesita constancia para ver los resultados y gestionar mejor el estrés. Gracias a los ejercicios que se realizan en esta técnica, los tejidos del rostro se vuelven más tersos y moldeados.
Cómo mejorar el rostro con el yoga facial.
- ¿Qué es el yoga facial?
- Beneficios de esta práctica.
- Ejercicios faciales que mejoran la calidad de tu rostro.
1. ¿Qué es el yoga facial?
El yoga facial es una técnica que consiste en una serie de estiramientos, ejercicios de tonificación y masajes que ayudan a todos los músculos del rostro para que mantengan su fortaleza y elasticidad, recuperando al rostro su estado más juvenil. La serie de ejercicios están dirigidos a todas las edades y tipos de piel y solo requiere unos minutos de tu tiempo.
Según esta disciplina, el rostro tiene muchos puntos de energía que al ejercitarlos (junto con la meditación) mejora el crecimiento personal y por lo tanto físico. Es decir, es una disciplina que está más centrada en mejorar el estado anímico y por consiguiente el físico.
Objetivos como mejorar la salud y bienestar tanto del rostro como del cuello y el escote, son posibles gracias a esta técnica que oxigena la piel de la cara y estimula el riego sanguíneo generando bienestar en el área facial. Además, también relaja las tensiones que se acumulan en el rostro. En definitiva, es una técnica que logra aumentar la autoestima y reduce el estrés causado por el día a día.
2. Beneficios de esta práctica
La práctica de esa disciplina aporta múltiples beneficios, entre ellos destacan los siguientes:
Combate la flacidez
La falta de hidratación o el poco ejercicio físico puede propiciar la flacidez del rostro. De modo que, incorporar la práctica del yoga facial a tu rutina conseguirá activar los músculos del rostro así como mejorar la circulación de los vasos sanguíneos, mejorando el aspecto visible de la piel.
Aporta flexibilidad a la piel
Cuanto más flexible sea la piel del rostro, más tarde sufrirá su envejecimiento. Así, el cutis permanece más terso permitiendo incluso no solo atenuar sino eliminar arrugas. Sin embargo, la flexibilidad de la piel no solo se consigue con la práctica de ejercicios de yoga sino combinándolos con hidratación tanto interna como externa.
Oxigenar la piel ayudará a que ésta circule y que los productos hidratantes se absorban con más eficacia. Así, la combinación de ambos hábitos, de forma constante, hará aumentar los beneficios de los ejercicios faciales.
Fortalece la musculatura facial y del cuello
Trabajar los músculos del rostro hace que la piel se mantenga más tersa y en su sitio, disminuyendo su flacidez. De esta maneara, los músculos y piel del cuello también se fortalecen haciendo que la grasa se reduzca.
Estimula la circulación del rostro
La práctica del yoga facial estimula la circulación de los vasos sanguíneos y rejuvenece la piel gracias a su oxigenación tanto del rostro como del cuerpo. Durante el proceso, la sangre retira desechos de los nutrientes y consigue eliminar toxinas innecesarias para el organismo y el aspecto de la piel.
En definitiva, el yoga facial tiene muchos beneficios para el rostro. Poniendo en práctica los ejercicios, se tonifican los músculos faciales y se consigue la piel del rostro tenga un aspecto más joven y cuidado, además que ayuda a relajar su musculatura.
Entonces, ¿consigue atenuar las arrugas?
Aunque la práctica de deporte para tonificar todo el cuerpo sea la más común, no se deberían olvidar los músculos de la cara. Uno de los beneficios del yoga facial es sin duda que logra combatir las arrugas del rostro gracias a la oxigenación del cuerpo a través de la respiración y la circulación de la sangre.
El yoga facial flexibiliza y tonifica la piel. También estimula la producción de colágeno y elastina en una de las capas de la dermis, mejorando las arrugas. La práctica esta técnica se encarga de fortalecer los laterales externos e inferiores, fortalece las mejillas y los labios; además del cuello y la frente.
El yoga consigue tanto activar la musculatura como la circulación de todo el cuerpo eliminando toxinas. Por lo tanto, el yoga facial sí consigue aportar al rostro un aspecto más juvenil.
3. Ejercicios faciales que mejoran la calidad de tu rostro.
El plan de ejercicios de yoga facial recomendado son de tonificación y resistencia muscular que comienzan desde el cuello hasta la frente. Se recomienda llevarla a cabo durante 15 minutos, cinco veces por semana realizando 15 repeticiones por ejercicio.
3.1. Ejercicio para la frente
En este caso, la zona beneficiada será el tono muscular de la frente. Para realizarlo de forma adecuada se debe:
Colocar los dedos en la frente realizando un ligero movimiento hacia arriba de forma que los ojos se abren. Después, levantar las cejas varias veces asegurándote de no estar provocando arrugas.
3.2. Ejercicio para la zona de los ojos
Este tipo de ejercicio previene las arrugas alrededor de los ojos y se realiza moviendo los ojos de derecha a izquierda y de izquierda a derecha. Después, se debe realizar el mismo de abajo a arriba asegurando siempre que solo se muevan los ojos, la cara permanece inmóvil durante todos los movimientos.
3.3. Ejercicios de pómulos y mejillas
Ejerciendo una presión de los labios hacia dentro de la boca, pon los dedos índice en ambas comisuras haciendo una ligera presión hacia fuera y hacia dentro. Se recomienda realizar la repetición 10 veces.
Dr. Jesús Benito Ruiz es el director médico y cofundador de Antiaging Group Barcelona, con más de 30 años de experiencia en Cirugía Plástica, Estética y Reparadora. Licenciado con honores en Medicina y Cirugía por la Universidad de Valencia, se especializó en Cirugía Plástica en el Hospital “La Fe”. Ha sido presidente de la AECEP y vicepresidente de la SECPRE.
Reconocido por su innovación en técnicas quirúrgicas, el Dr. Benito Ruiz ha desarrollado procedimientos avanzados como el aumento mamario con grasa propia y el lifting facial sin cicatrices visibles. Es autor de numerosas publicaciones científicas y participa activamente en congresos internacionales. Entre sus premios destacan el Premio Gómez Ferrer Navarro de Cirugía y el Premio McGhan por sus avances en cirugía mamaria.